The Adventures Of Spreadsheet Girl

“Hola, soy Rebecca Bloomgood y soy una adicta a las compras”, dice la joven de pelo rojizo, ante aquellos desconocidos, y la gente que se sienta en aquel círculo responde con efusión: “Hola, Rebecca”. No sé si esto pasará en la película, pero realmente debería suceder.

Una vez más el estereotipo de la mujer con poco cerebro pero un enorme apetito para “ir de shopping” vuelve al cine. A la protagonista solo le importa comprar, comprar y comprar. La diferencia es que la astuta pluma de la escritora de la serie de libros Shopaholic, en la que está basada la película, supo tratar con astucia y mucho humor un asunto que podría haber caído en los lugares comunes.

Sí, Sophie Kinsella se supo reír de las desgracias femeninas con mucho ingenio y es tal vez eso lo que atrajo a las lectoras aficionadas a este tipo de novelas conocidas como “chick-lit”, dedicadas especialmente al público femenino, representando un tipo muy especial de mujer. Estas damas siguen buscando el amor de la mano de algún hombre pintón, como ya lo hacían en los libritos de Corin Tellado, pero ahora lo hacen desde la otra orilla. Son independientes, exitosas, bonitas, avanzan por la vida llevándose todo por delante, aunque son sensibles y soñadoras. Les cuesta mostrar su lado débil, pero ahí está, en algún momento aparece y ese es el fuerte de las tramas que las tienen como protagonistas y que convierten a este tipo de libros en bestsellers en muy poco tiempo.

En el caso de Rebecca, la protagonista de Loca por las Compras, su problema principal está en su manía por la ropa de marca, los zapatos de diseñador y todo tipo de accesorio que la pueda convertir en una joven elegante que esté acorde con sus sueños: trabajar en una glamorosa revista de modas. Cuando no consiga su objetivo, la chica terminará escribiendo una columna para una nueva revista financiera de la misma editorial. ¿Cómo aconsejar a los lectores sobre el cuidado del presupuesto mensual, si ella se gasta hasta el dinero que no tiene en la primera tienda que se le cruza?

No importa cómo, Rebecca sabe hacerlo y pronto se convierte en la estrella de la revista, manteniendo la doble vida de consejera y de “compradicta” que hace estallar todas sus tarjetas de crédito, pero ni siquiera puede pagarle la renta a su compañera de departamento.

Por supuesto, como en este tipo de películas, la solución vendrá con el tiempo y probablemente acompañada por un hombre que la ayude a valorarse y a darse cuenta de cuál es realmente la vida que quiere llevar.

CURIOSIDADES

1. Este film está basado en los dos primeros libros de la serie “Shopaholic”, escritos por la autora británica Madeline Wickham bajo el seudónimo de Sophie Kinsella. Hasta el 2007 hubo cinco novelas protagonizadas por el mismo personaje: Rebecca Bloomwood.
2. En la adaptación cinematográfica cambia el escenario. De Londres Rebecca pasa a vivir en Nueva York y camina entre las más famosas tiendas de la Gran Manzana.
3. P.J. Hogan fue el director elegido para realizar Loca por las Compras. Este australiano es conocido por haber dirigido El Casamiento de Muriel y La Boda de mi Mejor Amigo.
4. Aunque no es demasiado famosa, la actriz y escritora Isla Fisher comenzó a hacerse conocida en la televisión australiana desde chica, y luego actuó en Scooby-Doo, Los Rompebodas y Definitivamente, Tal Vez. Está en pareja con el extraño actor cómico Sacha Baron-Cohen.
5. El británico Hugh Dancy ya está acostumbrado a ser el galán de muchas de las películas en las que trabaja, como ya hizo en Ella, Encantada y Conociendo a Jane Austen.
6. Lynn Redgrave, la hermana menos famosa de Vanessa Redgrave, ha trabajado anteriormente bajo las órdenes de P.J. Hogan en Unconditional Love y Peter Pan. También actuó junto a Hugh Dancy en Conociendo a Jane Austen.
7. Completan el elenco Joan Cusack (Secretaria Ejecutiva, ¿Es o se Hace?, Novia Fugitiva), John Goodman (Los Picapiedras, Coyote Ugly, Meteoro), Kristin Scott Thomas (El Paciente Inglés, Gosford Park, La Otra Bolena), Leslie Bibb (Sociedad Secreta, Iron Man) y Krysten Ritter (27 Vestidos, Locura de Amor en Las Vegas).

¿Qué pasaría si fuéramos capaces de hacer nuestros sueños realidad? Pero no de la manera antigua; nada de desearlos y luego trabajar mucho por conseguirlos. Solo necesitaríamos imaginar lo que queremos y narrarlo a manera de cuento infantil, y, ¡voila!, al otro día se convertiría en realidad. ¿No sería genial?

A Skeeter (Adam Sandler) sí le parece genial, y después de todo él es el protagonista de esta historia de aventuras y mucha fantasía. Skeeter es como un chico grande, de esos que jamás maduran. Trabaja en un hotel desde hace muchos años y cuando cree que está a punto de ascender al codiciado puesto de gerente, el nuevo dueño del hotel elegirá a su yerno, Kendall (Guy Pearce), para ocuparse del puesto.

Skeeter está enojadísimo y a regañadientes acepta hacerle un favor a su hermana (Courteney Cox): como la mujer debe viajar, necesita que tanto él como una de sus colegas (Keri Russell) se ocupen de los niños en su ausencia.

El muchacho no se lleva demasiado bien con sus sobrinos, pero tendrá que hacer un esfuerzo, en especial cuando los niños le pidan que les narre historias antes de dormirse. Pero a ellos no les parecen demasiado entretenidos los cuentos que inventa su tío, así que comienzan a hacer intervenciones.

¡Qué sorpresa se llevará Skeeter cuando se de cuenta que todo lo que el inventa al día siguiente se hace realidad! Sí, todo: monstruos, aventuras, acción y romance. Y se alegra cuando se da cuenta que de esta manera podrá manipular la realidad para lograr sus objetivos. Pero lo que él no tiene en cuenta es que sus sobrinos tienen el control de los cuentos, y lo pueden meter en más de un problema.

Cuentos que no son Cuento es una comedia familiar, impregnada por el característico humor de Sandler, pero con una hermosa historia fantástica que promete atrapar a chicos y a adultos.

CURIOSIDADES

• Cuentos que no son Cuento es la primera película familiar de Adam Sandler.
• Los protagonistas de está película cuentan con la particularidad de haberse hecho populares en la televisión mucho antes de saltar a la fama en el mundo del cine. Adam Sandler demostró su ingenio cómico en el famoso Saturday Night Live. Courteney Cox brilló en Friends durante diez temporadas. Keri Russell fue la protagonista de Felicity; y no hay nadie que no siga reconociendo a Lucy Lawless como Xena, la Princesa Guerrera.
• Adam Shankman, el realizador de la cinta, es muy conocido por dirigir películas cómicas y familiares como Experta en Bodas, Una Intrusa en la Familia, Niñera a Prueba de Balas, Más Barato por Docena II y Hairspray.

Si lo que necesitábamos los espectadores era una prueba más de la poca originalidad en la que han caído las grandes ligas del cine, esa es la existencia de las remakes. ¿Qué hay más fácil que tomar una obra ya hecha y modernizarla para el público de la era de Internet? La misma premisa que la original, algunos cambios de guión, diálogos aggiornados, nuevos actores y una buena campaña de prensa, y listo, una idea vieja queda como nueva.

No hay que pensar demasiado, solo saber que el film original, en el que estará basada la nueva película, tuvo un cierto rendimiento en las boleterías, o es algún clásico del cine y por eso se presupone que los fanáticos querrán volver a su historia favorita, o que tal vez, ahora, se puede acercar a nuevos públicos que no sabían de su existencia, de la mano de caras conocidas para la audiencia de hoy.

Ya no se sabe lo que piensan los productores, pero lo cierto es que a cada rato alguna remake invade la pantalla y hace que nos preguntemos para qué vuelven a realizar una película que ya estaba filmada…

Este es el caso de My Bloody Valentine, que al menos tiene la originalidad de estar filmada totalmente en 3D (aún no se sabe si a Latinoamérica llegará en este formato).

Y así como el film original de 1981, la nueva My Bloody Valentine nos vuelve a contar la historia de Tom Hanniger (Jensen Ackles), un hombre que por un error produce una accidente en una mina, que se cobra la vida de cinco de sus compañeros y deja a otro en coma.

Al año siguiente, Harry Warden, el único sobreviviente, despierta para cobrar venganza y como si las veintidós personas que mata en la mina, en la víspera de San Valentín, tuviesen algo que ver con el error que lo dejó en coma, convierte la fiesta de los enamorados en una masacre, hasta que alguien se encarga de ajusticiarlo.

Diez años después, Tom vuelve a su antiguo hogar, justo para la fecha aniversario de aquella matanza. Nunca mejor dicho: “pueblo chico, infierno grande”. Todos lo creen culpable, incluso su mejor amigo (Kerr Smith, uno de los muchachos de la serie Dawson´s Creek) que ahora es policía y se ha casado con su ex novia (Jaime King).

Está demás decir que cuando los crímenes se vuelvan a suceder, todos pensarán que el psicópata de Harry Warden ha vuelto de la muerte para un último regalo de San Valentín.

CURIOSIDADES

• La película original es un típico ejemplo del cine slasher, un subgrupo del género de horror, caracterizado por la presencia de un psicópata asesino que se dedica a masacrar a todo el que se le cruza en su camino, en especial adolescentes. Generalmente tiene un móvil para cometer asesinatos, y es posible que use una máscara. Es probable, también, que los primeros disparos no le causen la muerte, y tiene un caminar característico y lento a la hora de perseguir a sus víctimas, que se agotan de tanto correr.
• El realizador de My Bloody Valentine, Patrick Lussier está abocado al mundo de terror; además de haber editado muchas películas de este género, fue el director de Drácula 2001.
• My Bloody Valentine (la original) es un film canadiense de 1981, que se estrenó en la época de gloria del cine slasher, allá por la década del ochenta. Sucesora de éxitos como Halloween y Martes 13 (más conocida como Viernes 13, el título original, cuya remake se estrenará el 12 de Febrero), hoy en día es considerada como un clásico de este tipo de películas de bajo presupuesto y mucha sangre.
• Si bien la original My Bloody Valentine ya se editó en dos oportunidades en formato DVD, este mes se anunció en lanzamiento de un nuevo DVD que, además de entrevistas y alguna que otra cosita, también incluirá los nueve minutos que habían sido cortados por ser considerados extremadamente gore (violencia demasiado explicita para cualquiera que tenga estómago).

Chico ama chica, chica ama chico. Cuántas películas se han servido de esta premisa para contar una historia… ¡infinidad! Pero en el caso de Crepúsculo el asunto es un poquito distinto: chico ama chica, chica ama chico, chico desea la sangre de la chica. Y sí, porque el chico es un vampiro.

¿Será el bisnieto de Drácula? ¿El primo hermano de Lestat? Tal vez, aunque es más probable que sea el camarada de Ángel, el vampiro con alma que enamoraba a Buffy. Sí, Edward Cullen está más cercano a este último por su juventud, por su hermosura y por enamorarse de una mortal. Sin embargo, en este caso Bella, la adolescente que sucumbe a sus encantos, difiere bastante de la rubia cazavampiros. Bella tiene también diecisiete años, pero está lejos de ser una muchacha popular o con increíbles poderes.

Bella es simplona, pero no a los ojos de este hermoso joven perteneciente a una familia de vampiros “vegetarianos” que se pasean por el colegio secundario de Forks, un pequeño pueblo aburrido y sombrío, donde la chica se muda a vivir con su padre.

Desde que sus miradas se cruzan y el aroma de Bella llega a la naricita perfecta de Edward, ya nada será lo mismo. Sí, espectadores, estamos ante uno de los grandes romances de la historia, sino pregúntenselo a los millones de adolescentes que ya coparon las salas de cine del mundo, y antes de eso, devoraron cada uno de los libros de la saga escrita por Stephenie Meyer. Crepúsculo está basado en el primer libro, Twilight, pero debido a su éxito, Luna Nueva, el segundo, ya está en preproducción.

El primero de enero del nuevo año será el día elegido para que los cines argentinos se llenen de griterío con espíritu adolescente. En Estados Unidos el film ha batido records en su primer fin de semana de estreno, ¿qué pasará por el país del sur? Habrá que esperar…

CURIOSIDADES

• Kristen Stewart con solo dieciocho años tiene una extensa filmografía. Primero interpretó a la hija de Jodie Foster en La Habitación del Pánico (sí, aunque no lo pareciera, era una niña), de Sharon Stone en Cold Creek Manor y de Meg Ryan en Entre Mujeres; la joven demostró con Speak y Los Mensajeros que es mucho más que una simple “hija”. Con Crepúsculo, por primera vez en una película para adolescentes, se ha convertido en una de las actrices del momento.
• El inglés Robert Pattinson además de prestarle su cuerpo al carilindo Edward Cullen, ya había aparecido en Harry Potter y el Cáliz de Fuego interpretando a Cedric Diggory. Las comparaciones entre la saga de Twilight y la escrita por J. K. Rowling son constantes. Tal vez ahora, para alejarse de los suspiros femeninos, el actor de veintidós años necesita demostrar que es más que un galancito, metiéndose en la piel de Salvador Dalí en el film de próximo estreno, Little Ashes.
• La directora Catherine Hardwicke ya había dirigido a la actriz Nikki Reed en Los Amos de Dogtown, y juntas, con anterioridad, escribieron el guión de A los Trece, una excelente película independiente que Reed coprotagonizó junto a la ascendente Evan Rachel Wood.
• ¿Problemas de tiempo? ¿Muchas críticas negativas? Sea cual sea la razón, la realizadora Catherine Hardwicke no será la encargada de llevar Luna Nueva a la pantalla. Los estudios ya eligieron al nuevo director: Chris Weitz, conocido por sus filmes Un Gran Chico y La Brújula Dorada.
• Kristen Stewart y Nikki Reed volverán a compartir rodaje en el nuevo film K-11, donde interpretarán a transexuales en prisión. La dirección estará a cargo de Jules Mann, la mismísima madre de Stewart.